Hoy ha amanecido con cierto aire de nostalgia, y como buenos revivalistas que somos al fin y al cabo, creemos necesario hacer un alto en la trayectoria del blog de perseguir la actualidad (ejem, en la medida de nuestras posibilidades), y recuperar un comentario que ya tiene algún tiempo. No obstante, el comprobar que aún esta disponible, y que por unos 6/7 miseros euros podéis experimentar la añorada e infravalorada sensación de descubrirlo una mañana en vuestro buzón, le dan un sentido especial a esta entrada. Lo cierto es que hace ya tiempo que preparo una entrevista para Chevas, el productor ejecutivo de este zine, pues creo que su militancia en el Punk, en el Hc, y en fanzines, conciertos, y demás saraos, convierte su testimonio en algo más que interesante. También su pasión por Dead Kennedys, Damned, y el Pressing Catch (algo que comparten fanáticamente algunos reponsables de este blog). La realidad es que por circunstancias físicas insalvables, unos 4000 km. de distancia, dicha entrevista no se llevará a cabo en un futuro inmediato, y como no me da la gana de hacerla por Internet, tendréis que esperar el día en que me acerque a Torrelavega, armado de grabadora. Ese día llegará, tarde o temprano. Esto que viene a continuación es un comentario que hice sobre el número 7 de Enciende la Mecha, publicado en el fanzine gratuito madrileño El Ojo Vago.
Con las facilidades que aporta el formato blog, le hemos añadido unos cuantos videos, puestos en las redes a disposición de todos por el propio autor del fanzine, para ilustrarlo mejor, ya que no tengo mi copia física conmigo en estos momentos, pero si tengo «los extras» que acompañan a esta cuidada edición, el cd y el dvd con temas y actuaciones de época, recuperadas e inéditas, mayormente. Los grupos no son exclusivamente Punk, si no que varían en géneros desde el Pop más oscuro al Rock más vacilón, pero como suele pasar en nucleos urbanos más pequeños, todos circulaban en una órbita común buscando un ocio propio, tratando de romper con los modelos de generaciones anteriores.
Enciende la Mecha #7 Los hechos son irrefutables. Gracias a este fanzine, por fin, sabemos la verdad: Torrelavega fué un amenazante e infeccioso agujero musical durante las décadas de los ’80 y ’90. Esta es la historia de otro municipio más, azotado por la debacle socio-laboral de la venerable Transición, la deliciosa droga barata, y la loca pasión de sus ciudadanos más jóvenes, por la música cruda, salvaje y antisocial. Cientos de bandas van apareciendo en escena, como en una función de teatro estudiantil, entre sus más de 160 páginas. Todas en riguroso orden, con sus antecedentes, sus circunstancias y sus oportunas batallitas. Los célebres, al menos para mí, Melopea (antes Melopea Intensiva), Kloakao, La Burla o Desechos Nucleares, se mezclan con un mogollón de bandas menos conocidas, pero que da vértigo tan solo imaginar el ambiente que debían crear en la ciudad en tiempos de festivales y otros jolgorios. Las eventualidades con la autoridad y sus favores tienen su espacio. La eterna y ágria rivalidad con la capital de la provincia, también. El material gráfico es abundante y de una calidad más que aceptable ¿Qué más queréis, joder? El autor detalla todo con un lenguaje personal y directo que, sospecho, alguna polémica ha debido causarle. La pena es que, al parecer, el maldito no ha vomitado todo lo que esconde en sus entrañas. Sospecho que algunas anécdotas se ha guardado aún.
Aqui hay un curro de documentación que poca gente tiene el valor de hacer. Y esto se debe, sin duda, a que esta historia es también la historia de Chevas, el realizador del fanzine. Aqui, la pelicula esta contada desde dentro. Con pasión, si, pero con sobriedad y honestidad. Y es que, el que no sueñe con escribir sus memorias de juventud, es que ha perdido el tiempo estudiando, y merece ser atropellado por un camión. Material de primera para entusiastas del género. Se acompaña todo, con un Cd y un Dvd, con testimonios sonoros y visuales de la época, para entrar en situación. Usad vuestro ciber-buscador favorito para saber cómo haceros con una copia a la mayor brevedad.
Al igual que cuando entrevistamos, en nuestro ya muerto programa de radio Mundo Subnormal, a Gotzon Hermosilla, responsable de la publicación del libro sobre toda la movida musical de Barakaldo, desde los ochenta, surje la idea sobre cuándo alguien se encargará de hacer lo propio con otros reductos musicales más próximos a la capital del Imperio, como el proletario nucleo de Vallecas, o el extrarradial Móstoles, y su mítica agua infecta que convierte a sus jovenes en perturbados músicos. Esto, claro, debe ser trabajo de documentalistas implicados de una manera u otra con la causa, porque si no sería frío y vacío periodismo, y eso no nos interesa.
Para cerrar esta entrada, incluimos un documental, creemos que no demasiado difundido, y que a pesar de caer en los habituales tópicos del género, paternalismos varios y ensalzamiento de cualquier tiempo pasado, aporta buenos testimonios y pintorescas imagenes de la época en el contexto que estamos tratando: la Marejada Cántabra. Un repaso, un poco más general, a localizaciones, protagonistas y bandas de la comarca, durante el período 80-85.
guapisimo!
Me gustaMe gusta