Otro año se acaba. Hay quién lo desea con verdaderas ganas, debido al loco ritmo de muertes célebres que se han ido viviendo en el mundo del espectáculo. Yo no creo que sea para tanto, mientras sean los demás los que sean suavemente, y acompañados por todas las lágrimas de sus fans, depositados bajo tierra. Es mejor no tener demasiada prisa por que pase el tiempo, hacedme caso. Los conciertos también acaban, pero solo para ir dejando paso a otros que ya se van asomando desde el futuro 2017. Que urgencia siempre.
Cuando veo un doble bombo aparecer en escena, algo tiembla dentro de mi. Allá vamos con la lluvia de mortero. Haiboku es una banda de Hc bien ruidoso, de la que apenas puedo destacar que tan solo tocaron quince minutos en un acto de tremenda generosidad para con mis oídos. Tampoco he encontrado mucha información sobre ellos en la red, más allá de su inspiración japonesa para el nombre y el ruido infernal, por lo que supongo que no llevan mucho tiempo.

Es la tercera vez que veo a Prisión Oculta, y poco a poco parece que voy pillándoles el royo. Sigue siendo Hc-Punk endemoniado, con cambios de ritmo inesperados y un bateria que le pega durísimo. Parece que en cualquier momento van a saltar sus brazos despedidos por los aires. Tienen una demo grabada del año pasado.


Anti Sex esta formado por componentes de otras bandas como Riña y Trauma, y me recuerdan un poco a Cocadictos en la voz, que es lo que más mola y que, dicho sea de paso, se oyó como el culo durante todo el concierto debido a problemas habituales de la sala, según me dijeron. El sonido tiene cierto royo oscuro y machacón que, sin ser nada especial, entra bien. También tienen una demo del pasado año.

Desde Florida vinieron Klout a dejarse bien el pellejo sobre el escenario. Su actuación fue bastante breve, pero duró lo suficiente para dejar satisfecho a cuantos quisieron poner en riesgo su integridad física uniéndose al baile salvaje de su cantante, que por mucho que se esforzó, no consiguió que se le escuchara decentemente. Su estilo es el Hc yanqui más duro y peleón que te puedas echar a la cara en estos tiempos que nos ha tocado vivir. Testosterona desbordando a borbotones.

Cerraron la noche Kombat, representando lo que se ha dado en llamar la Nueva Ola del Hardcore de la capital del Imperio USA. Para mi oído poco educado, sigiueron un poco la línea de la banda anterior, con algunos toques más oscuros y apesadumbrados. A su cantante se le oyó menos que a ninguno, si cabe. ¿Ya he dicho que el juego de voces iba a su puta bola? Ah vale, por si acaso… Por lo demás, intenso y crudo, como era de esperar.

